[MDYRE2]CAPÍTULO 18 – Ser romántico

Karl

Desde mi plática con Alegra he pesado mucho en lo que me dijo: lo de ser más románticos y menos sexuales. 

Al principio, pensé que era una broma, pero, después de reflexionar, me he dado cuanta que posiblemente tenga razón y que es hora de cambiar ciertas cosas en nuestra relación para que esto vaya para bien. La verdad, no quisiera que lo nuestro se desgastara pronto y terminara antes de empezar. 

Por eso, y convencido de que necesito ideas, he decidido llamar al príncipe del romance, a la única persona que sé tendrá cientos de ideas para darme, y que sabe cómo mantener una relación estable después de tantos años. Hablo de Moríns. 

⎯¿Me estás diciendo que yo no soy el rey?, ¿quién es? No me vayas a contestar que Tristán porque me muero. 

Me río. 

⎯Mira Moríns, no tengo mucho tiempo. Debo aprovechar que Alegra está hablando con su padre para poder hacer esto, así que, después, podemos discutir quién de los dos es más romántico. 

⎯Dime quién es… ⎯insiste. 

⎯Es Cho, ¿vale? 

Moríns encoge los hombros. 

⎯Bueno, al rey lo del rey. Dime, en qué te puede ayudar este príncipe. 

Suspiro. 

⎯Necesito que me digas qué puedo hacer para aumentar el romance en mi relación. 

⎯¿Romance?, ¿Alegra quiere romance? ⎯Y de pronto Moríns comienza a reírse⎯. Esa no me suena a Alegra. 

⎯Venga, me vas a tomar en serio o le llamo a Cho. 

⎯Lo siento, lo siento. Lo que pasa es que conozco a Alegra desde pequeña y esto que me dices no encaja con su perfil. Ella juraba y perjuraba que el romance no era lo suyo. 

⎯Pues ya ves que sí. Me dijo hace días que quiera una relación más romántica y menos sexual. 

⎯¿Menos sexual?

⎯Así es. 

⎯¿Alegra?, ¿Canarias?, ¿la hija de David Canarias?, ¿la hermana de Sila? 

⎯Me voy ⎯respondo, para luego levantarme de mi escritorio. 

Sin embargo, Moríns me toma del brazo. 

⎯Es broma. Te prometo que me comportaré. 

⎯Vale, pues ayúdame. Alegra en cualquier momento llega y no quiero que escuche esto. Quiero sorprenderla. 

⎯Vale, vale… dime, ¿qué es lo que le gusta a Alegra? 

⎯¿Le gusta? 

⎯Sí, ¿qué es lo que le gusta? 

Me aclaro la garganta. 

⎯Pues, últimamente le gusta en la sala. 

⎯¿En la sala? 

⎯Sí, cerca de los ventanales. Encerramos a Arqui en la habitación vacía que tenemos y lo hacemos en la sala. Sobre el sofá, a veces contra el ventanal. Es excitante porque… 

⎯¡BASTA! ⎯Me detiene Moríns⎯. No me estás contando de que tienen sexo en el ventanal, ¿cierto? 

⎯Pues sí, me preguntaste qué le gusta a Alegra, y te lo conté. 

⎯No, Karl, no me hagas esto, amigo… Te estoy comentando que la conozco desde pequeña y me sales con esto. 

⎯Bueno, pues no sé qué decirte. 

⎯Qué le gusta de pasatiempos, gustos… ¡Dios!, esos ventanales me gustan mucho. 

⎯A nosotros también ⎯respondo, y esbozo una ligera sonrisa al recordar todo. 

⎯Como sea… ¿Qué pasatiempos tiene? 

Me quedo en silencio. 

⎯Pues, le gusta bailar reggeatón. 

⎯¿Qué más? 

⎯Pues… le encanta dibujar garabatos en la libreta para concentrarse. 

⎯¿Qué más? 

⎯¿Tomar fotos? 

Moríns suspira. 

⎯¡Guau!, no me digas que no tienes idea de lo que le gusta a Alegra. 

Me quedo en silencio, y reflexionando me percato que es verdad, no tengo ni idea de lo que le gusta a Alegra, además del sexo. 

⎯¿Cuál es su color favorito? ⎯Insiste Moríns. 

⎯¿Las lentejuelas? 

De pronto, Moríns comienza a reírse. Su risa es tan ruidosa y libre que invade mi oficina. 

⎯¡Ay, Dios!, hermano… esto será más difícil de lo que creí. 

⎯Alegra y yo nos conocimos mediante el sexo y así nos amamos, ¿qué tiene de malo? Yo solía ser un poco más romántico, pero ella me rechazó. Ahora no entiendo por qué quiere que vuelva a lo romántico. Incluso no entiendo nada. 

⎯Lo sé, las mujeres son así. Sila, por ejemplo, me pidió un poco de espacio los viernes para estudiar, así que me llevó a los niños al parque o al cine. Ahora me reclamó de que la dejo sola mucho tiempo los viernes. 

⎯Pfff.

⎯Pfff ⎯me contesta Moríns. 

⎯Entonces, ¿no tengo remedio? 

⎯Nah, ¡qué va!, claro que sí. Solo debes preguntarle cuáles son sus gustos. 

⎯¿Vale? ⎯ contesto⎯ ¿Cómo un tipo cuestionario? 

⎯Pues… si quieres. 

⎯Vale. 

⎯También sirve hacer algo inesperado para ella. 

⎯¿Inesperado? 

⎯Sí, como algo que no se espere. 

⎯Dios, Moríns. Me la pones difícil. No sé cómo hacer eso. No suelo ser bueno para improvisar o cosas así. Tienes que decirme algo específico para que pueda lograrlo. ⎯Me sincero. 

Él suspira. Se queda pensando por un momento, mientras juega con su elegante corbata de seda. Después se endereza y sonríe. 

⎯Hazle un cuarto oscuro. 

⎯¿Cómo el de las cincuenta sombras de Grey? 

⎯¡NO!, de revelado. Siempre había querido uno. Puedes hacerle un estudio con cuarto oscuro. Ya sabes, lugares para poner sus cámaras, espacio de revelado… 

⎯¡Ah!, ya, ya… bueno, pues puedo tratar. En ese aspecto no soy tan bueno con las manos. 

⎯Yo te puedo ayudar, Tristán también y posiblemente Robert. 

⎯Bien. 

⎯Lo demás, pregúntale, estoy seguro de que se te ocurrirá algo. 

En eso, la puerta de mi oficina se abre y veo que Alegra entra con un rostro bastante raro, uno que jamás le había notado. Puede que no sepa mucho de sus gustos o pasatiempos, pero la conozco a la perfección en actitudes, gestos y voz y sé cuando hay algo diferente. 

⎯¡Moríns! ⎯expresa, al ver a su cuñado. 

⎯Hola cuñada y adiós cuñada. Iré a ver si Sila está disponible para ir a almorzar algo. 

⎯Lo está. Me la encontré en el pasillo y estaba a punto de tomar su descanso. 

⎯Perfecto. Toma nota, güero, eso también se puede ⎯me comenta, y yo asiento. 

⎯¿Se puede qué? 

⎯Cosas entre el güero y yo. En fin. Los dejo, espero que se porten bien y espero que limpien esos ventanales. 

Cierro los ojos y Alegra se sonroja. 

⎯¿Le dijiste? 

⎯No entendí su pregunta y pensé que esa era la respuesta. ⎯Admito. 

⎯No lo entiendo, eres un médico brillante y a veces no entiendes preguntas sencillas. 

⎯Ambiguas, amor, no entiendo preguntas ambiguas. ⎯Voy hacia ella y la abrazo⎯ ¿Lista para irnos? 

⎯Sí, sí claro… ⎯contesta, para luego acomodar su bolsa. 

Ambos salimos del hospital en silencio, y cuando estamos a punto de entrar al mi auto, ella se detiene. 

⎯¿Crees que podamos caminar? 

⎯¿Al piso?, ¿eso nos tomaría horas?

⎯No, no al piso. Al parque o a algún lugar. Necesito respirar. 

Veo en su rostro el deseo de huir y la confusión, por lo que sé que algo pasó con su padre y que las cosas no salieron bien. 

⎯Vamos al parque. 

⎯¿No estás muy cansado? ⎯inquiere. 

⎯No, no lo estoy. Vamos. 

Dejo mi bata, mi maleta y cierro la puerta del auto. Después tomo de la mano a Alegra y ambos salimos del estacionamiento para comenzar a caminar por la calle. Ella va en silencio, viendo hacia el frente y sintiendo el fresco viento de la mañana. El verano está a punto de terminar y pronto el otoño entrará enfriando todo. 

⎯Sabes, estaba pensando que pasó un año de que nos volvimos a encontrar. ⎯Inicio la conversación. 

⎯Cierto. 

⎯Fue un verano, ¿recuerdas? 

⎯Sí. Uno donde casi muero atropellada ⎯responde, para luego sonreír. 

Una vez más nos quedamos en silencio. Al parecer, Alegra no tiene muchas ganas de platicar.

⎯Esto cuenta como romántico, ¿no? Paseo de la mano por la ciudad ⎯insisto en hacer conversación, esperándo a que ella se abra y me diga qué le sucede. 

⎯Fíjate que estaba hablando con Moríns sobre… 

⎯Karl ⎯interrumpe⎯, tenemos que hablar. 

Me detengo de inmediato y suspiro. 

⎯Mira Alegra, yo te amo mucho, yo te juro que trataré de ser más romántico. Incluso hoy hablaba con Moríns sobre eso y me dio unos consejos. Solo necesito saber qué actividades te gusta hacer, además de solo tomar fotos y bailar reggaetón. Puede ser lo que quieras, hasta pintura al óleo si gustas… no me gusta mucho, pero por ti pintaría al óleo. 

⎯¿Por qué me dices eso? 

⎯¿De la pintura al óleo? 

⎯No, todo eso. Solo te dije que necesitábamos hablar. 

⎯Por eso. Cuando estás a punto de terminar una relación, esa es LA FRASE. 

⎯¿Qué frase? ⎯pregunta extrañada, y ahora recuerdo que Alegra jamás ha terminado una relación. 

⎯Nada… ¿Qué me quieres decir? 

Alegra se suelta de mi mano y se adelanta unos pasos, después regresa y toma ambas manos. 

⎯Te mentí. 

⎯¿Me mentiste? 

⎯Sí. 

⎯¿Si vas a cortar conmigo? 

⎯No, bueno, sí, bueno, no sé. 

Comienzo a confundirme de verdad. 

⎯Ale, basta… solo dime que me estoy volviendo loco. 

⎯Es que puede ser muy malo o el final. 

⎯¿Qué? 

Ella suspira. 

⎯Te mentí acerca de algo. Bueno, no te mentí, simplemente lo oculté y ahora ha salido a la luz. Bueno, en realidad mi papá lo sacó a la luz. Pensé que pensaría que el sobre era algo de moda y revistas y él lo tiraría a la basura como la vez que tiró el sobre de la reinscripción a Vogue y le reclamé tanto que… 

⎯Ale… ⎯Le pido, al ver que se está yendo a otro lado⎯. Solo dime. 

Alegra cierra los ojos. 

⎯Apliqué a un trabajo en Nueva York hace meses y me dijeron una respuesta positiva y es mi última oportunidad para darles una respuesta ⎯dice rápido, mientras aprieta los ojos como si quisiera evitar todo lo que me está diciendo. 

Me quedo en silencio procesando la información. ¿Trabajo?, ¿Nueva York?, ¿última oportunidad?, ¿qué es lo que está pasando? 

⎯He evitado decírtelo porque tenemos tanto aquí y no quiero que se arruine. Tenemos trabajos estables, un piso y Arqui. Lo menos que quiero es perder todo esto, pero, es mi trabajo soñado. No he tomado una decisión sobre la respuesta final, pero, te comprendo si me dices que es una locura. Sé que lo es… yo puedo quedarme. 

⎯¿Quieres quedarte? 

⎯No ⎯responde de inmediato⎯, pero tampoco me quiero ir. 

⎯Ale… 

⎯Nunca pensé que me vería así, decidiendo entre lo que amo y lo que quiero. Yo entiendo muchas cosas y lo veo. Aquí tenemos todo, mi familia está aquí, tú tienes un trabajo estable y estás haciendo tu sueño realidad. 

⎯¿Mi sueño? 

⎯Sí, ser jefe de cardiología. 

Niego con la cabeza. 

⎯No, mi sueño era ser cardiólogo y lo logré. Mi sueño no es ser jefe de nada. Es más, debo confesarte que acepté el trabajo en el hospital de tu padre por ti. 

⎯¿Por mí? ⎯me dice con los ojos brillantes por las lágrimas. 

⎯Sí. Pensé que eso querías. Digo, Moríns trabaja para la fundación, Cho está ligado al conglomerado. Eres unida a tu familia y pues dije: Si voy a estar con mi mujer el resto de la vida, ¿por qué no? 

⎯¿El resto de la vida? ⎯me pregunta, y esboza una hermosa sonrisa. 

⎯Sí, porque yo veo esto para mucha vida. La verdad es que no me veo con nadie más, me complementas en todos sentidos y yo te amo. Eres las válvulas cardíacas de mi vida.

Alegra sonríe. 

⎯¿Cómo? ⎯pregunta. 

⎯Sí. Las válvulas cardíacas. El corazón tiene cuatro válvulas principales: la válvula mitral, la válvula tricúspide, la válvula aórtica y la válvula pulmonar. Estas válvulas se abren y se cierran en sincronía para permitir que la sangre fluya en una sola dirección a través del corazón. Deben funcionar en armonía para asegurar un flujo sanguíneo adecuado y evitar el retroceso de la sangre. La falta de funcionamiento adecuado de cualquiera de estas válvulas puede llevar a problemas cardíacos.

⎯Karl… ⎯Me pide. 

⎯Lo siento, sabes que no puedo parar. Lo que quiero decir es que, eres lo que necesito para que mi corazón esté sano y para que funcione. Tú y yo funcionamos en armonía y pues… que te amo. Funcionamos como las válvulas cardíacas que deben estar unidas al ritmo cardíaco y al funcionamiento adecuado del corazón en su conjunto para que el sistema circulatorio funcione correctamente.

Alegra se lanza a mis brazos y me aprieta contra su cuerpo en un abrazo. 

⎯Es lo más romántico que me han dicho y eso que no entendí todo. Solo que me amabas para toda la vida. 

⎯Lo sé… el corazón es complicado y sí, te amo para toda la vida. ⎯Me alejo de ella y la veo a los ojos⎯. Sabes que no soy bueno expresando todo lo que siento en palabras, por eso de ser romántico no es lo mío. Pero sé expresarlo en otras formas. Como cuando te hago el amor por las mañanas, o el café que compartimos juntos, yendo a bailar reggeatón cuando sabes que no me gusta tanto. 

⎯Te gustan algunas. 

⎯Sí, pero sabes que lo mío es menos perreo más música clásica. Lo que quiero decirte, es que te amo de todas las formas posibles y te lo demuestro de todas las maneras que encuentro. Incluso, te lo demostraré diciéndote esto: Vámonos. 

⎯¿Vámonos?, ¿al piso?, digo lo que me dijiste, me encendió pero… 

⎯Ale… vámonos a Nueva York. 

Ella abre los ojos, sorprendida. 

⎯¿De verdad?

⎯Sí, vámonos. 

⎯Pero y la estabilidad que siempre habías querido. Aquí la tenemos y allá. 

La tomo de ambas manos y las beso. 

⎯La estabilidad para mí no es una casa o un auto… para mí, estabilidad es esto, lo que tenemos. Tú y yo juntos, siempre, ya sea aquí o en Nueva York. El saber que podemos afrontar todo juntos y que no importa lo que pase, nos tenemos… y a Arqui. 

Alegra acaricia mi rostro. 

⎯Pero, y tu trabajo. 

⎯¿Hay hospitales en Nueva York, no? ⎯le digo.

Ella asiente. Me besa sobre los labios. 

⎯Te amo Karl. Eres el hombre más romántico del mundo. 

⎯¿Más que Cho?

⎯Más… ⎯contesta, acercándose a mis labios. 

⎯No le digas a Moríns eso, al parecer el tema es sensible para él ⎯murmuro. 

Alegra se ríe y luego me da un beso que me sabe a amor puro. 

⎯Me encanta ser tu válvula principal que hace latir tu corazón. 

⎯Y a mí lo sexy que te escuchas hablando en términos médicos… ⎯le comento, haciéndola reír⎯. Dime más. 

⎯Hemoglobina. 

⎯Más… ⎯Le pido, y ella se ríe. 

⎯Gonadotropina Coriónica Humana… Positivo  ⎯habla, para luego reírse ligeramente. Sin embargo, yo me separo para verla. 

⎯¿Dónde demonios viste eso? ⎯pregunto.

⎯En mis análisis. Ves que nos hacen análisis de sangre cada seis meses y pues fueron los resultados de los últimos. Pase por ellos hoy al hospital. 

Alzo las cejas demostrando mi sorpresa, al escuchar lo que estoy escuchando, si esto es verdad, entonces…

⎯El hCG positivo solo significa algo…⎯ Alegra abre los ojos, sorprendida. 

⎯¿Cómo qué?  

⎯Alegra… estás embarazada ⎯pronuncio en voz alta, y ella se desvanece en mis brazos.