Lila
Jamás había visto a mis padres tan preocupados, y no está por demás, me desaparecí sin avisarles, ni siquiera a mis hermanos. Anocheció en España y yo amanecí en México, así que tampoco puedo juzgarlos o pedirles que no me regañen o me reprochen.
Mis padres no perdieron ni un instante. Entraron por la puerta y me abrazaron con fuerza, mi mamá revisando que no estuviera herida y mi padre haciéndome cientos de preguntas sobre mi salud. Luego, me abrazó con aún más fuerza y susurró en mi oído: “Me moriría si te pasara algo, ¿lo entiendes?”
La preocupación también llegó de parte de mis hermanos, quienes, sin pensarlo dos veces, viajaron desde diferentes lugares para asegurarse de que estuviera bien. Algunos abandonaron sus actividades diarias, otros vinieron con sus familias, pero todos tenían una sola misión: asegurarse de que yo estuviera a salvo. A veces olvido que pertenezco a la familia Ruiz, donde la regla es simple: donde hay un Ruiz de Con, van todos.
Sin embargo, la decisión que he tomado no ha sido bien recibida por ellos. A pesar de haberla explicado una y otra vez, no logran comprenderla por completo. Parece que me espera un arduo camino para que finalmente la acepten.
⏤¿Cómo que te quedarás en México? ⏤ vuelve a preguntar mi padre. A pesar de que se lo he dicho ya dos veces ⏤. No lo comprendo.
⏤Sí, me quedaré aquí, en el piso colorido. No quiero regresar a Madrid.
⏤Pero, ¿tu taller? ⏤ pregunta mi madre, bastante desconcertada ⏤¿No luchaste tanto para abrirlo y conseguir clientes?
⏤Mis únicas clientes son las Karagiannis y, se han dedicado a arruinar mi reputación en Madrid. Lo sé, porque Cassandra Karagiannis ya dijo que me quedé con su vestido de novia y no le regresé su dinero.
⏤That bitch! ⏤ expresa Alegra, bastante enojada.
⏤Ale… ⏤ murmura mi padre.
⏤Es que lo es. Yo no entiendo por qué no estamos hundiéndolos a todos. Tenemos el poder, los contactos, el dinero.
Mi padre, suspira.⏤ ¿Crees que yo no tengo ganas de hacer eso?, ¡claro que sí!, pero tu abuela dijo estrictamente que no nos metiéramos con esa familia y si ella lo dice, sabe el porqué.⏤ Mi padre se acerca a mí y me da un beso sobre la frente⏤. No te preocupes por eso. Mandaré a alguien para que recoja el vestido y se lo envíe, ¿te parece?
⏤Da igual… todo da igual ⏤ respondo ⏤, aun así, te lo agradezco.
⏤Y, ¿solo por eso te quieres quedar aquí? ⏤ pregunta mi hermano.
⏤No, tal vez suene tonto, pero, necesito pensar. No sé si lo entiendan: me acaban de engañar, de romper el corazón. Solo necesito tiempo lejos de Madrid porque necesito pensar y ver cuál será el próximo paso. No sé, posiblemente, pueda diseñar vestidos aquí. Tengo contactos, ¿recuerdas a Adolfo Núñez?, él me dijo que podía diseñar para él.
⏤¿Dejarás tu propio taller y firma por trabajar en el de alguien más? ⏤ inquiere Sila, quien ha estado muy callada desde que llegó.
Asiento con la cabeza.⏤ Sé que no les agrada, pero, puede ser una opción. Creo que el objetivo es que siga diseñando vestidos de novia, ¿no?
⏤Pero, tienes tantos diseños únicos y especiales, ¿vas a permitir que una cosa así te detenga? ⏤ Escucho a Alegra, y la veo bastante consternada ⏤. No puedes dejar que esto te venza, no puedes abandonar tu sueño por un amor que no se dio.
⏤¿Disculpa? ⏤ pregunto, en un tono que denota enojo ⏤¿Ahora viene Alegra Canarias a darme lecciones sobre el amor?, cuando ella misma le dijo a su novio que no lo amaba porque tenía miedo.
⏤Lila ⏤ murmura mi mamá.
⏤No, basta de esa Lila”⏤ expreso con frustración; veo de nuevo a mi hermana ⏤.Parece que ninguno de ustedes me comprende, y lo entiendo. No les conté sobre mi relación con Antonio porque quería mantenerla privada, porque por una vez quería algo solo para mí. Lo admito, no salió como esperaba, pero eso no les da derecho a juzgarme y pensar que lo que estoy haciendo con mi vida es un desatino. Todos ustedes pueden tener una historia de amor perfecta, y los felicito por ello, pero yo no. Así que, al menos una vez, solo una maldita vez, quisiera que comprendieran el desamor y lo vieran en mí. No estoy abandonando mis sueños, solo necesito tiempo para pensar, para empezar de nuevo, y no tengo ni idea de cómo lo haré. ¿Es tan difícil de entender?
⏤No, no lo es ⏤ contesta mi padre, y al parecer, le he traído recuerdos de su propia historia de amor.
⏤Me quiero quedar porque aquí me siento segura. Porque no quiero regresar a Madrid y recorrer las mismas calles y los lugares donde estuve con él. Acá en México no hay Karagiannis, ni la diseñadora de vestidos, ni compromisos secretos, ni promesas rotas. Acá, solo soy Lila Canarias, una mujer más, ¿entienden? Así que quieran o no, me voy a quedar, y si no me apoyan, yo me las veré sola ⏤ hablo contundentemente.
⏤No digas eso, claro que te vamos a apoyar, solo qué… te quedarás sola y creo que no es lo mejor para ti ⏤ habla mi madre, en ese tono de ternura que tanto me consuela.
⏤Yo me quedaré con ella ⏤se escucha la voz de Pablo, quien ha estado prestando atención a la conversación ⏤. Solo por unos meses. La señora Julie me ha encomendado muchas tareas aquí, y también tengo algunos asuntos personales que atender. Puedo hacerle compañía durante este tiempo. Cuando regrese a Madrid, si ella desea regresar, lo hará, y si no, que se quede si así lo prefiere.
⏤¿Seguro? ⏤ pregunta mi papá.
⏤Sí, no me cuesta nada. Así se pueden quedar tranquilos. Bueno, si es que confían en mí.
⏤Claro que sí, Pablo. Claro que lo hacemos.
⏤Bueno, entonces ya está decidido. Ahora, si me disculpan, me quiero ir a dormir, estoy sumamente cansada y supongo que ustedes también lo están.⏤Mi padre asiente con la cabeza, para después abrazarme. Respiro su delicioso aroma, y me trae recuerdos de la infancia, cuando él me consolaba cada vez que pasaba algo.
Mi padre no sabe que fue gracias a él que confié en Antonio desde un principio. Crecí con la firme creencia de que los hombres podían ser buenos, porque había tenido un padre ejemplar. Sin embargo, me equivoqué. Si mis expectativas respecto a los hombres son tan elevadas, es gracias a la influencia positiva de mi papá en mi vida.
⏤Estaremos en el piso de abajo, por si nos necesitas, ¿de acuerdo? ⏤ me murmura.
⏤De acuerdo.
⏤¿Puedo quedarme? ⏤ pregunta Alegra. Yo asiento con la cabeza.
⏤Bueno, entonces nos vemos mañana. Duerman rico ⏤ habla mi mamá, para luego darme un abrazo y un beso sobre el cabello ⏤. Solo piensa bien lo que decidas, Lila, yo siempre te apoyaré.
⏤Gracias mamá.
Mi hermana, Sila, me da un abrazo, y después David. Al final, todos se despiden de Pablo y nos dejan a los tres en el piso. La platica de horas se terminó, al parecer, todo ha quedado claro y ya no hay más que decir.
⏤Bueno, me iré a dormir. Mañana tengo un día pesado. Duerman bien.⏤ Se despide, Pablo, dejándonos a mi hermana y a mí solas.
⏤Vamos a dormir. Estoy cansada del vuelo.
⏤Vamos⏤ contesto. Y ambas entramos a la habitación para perdernos entre las sábanas de la cama.
***
3 am
No puedo dormir. Trato pero no es algo que mi cuerpo desee en este instante. Estoy dando vueltas de un lado al otro sobre la cama, mientras mi hermana Alegra duerme a pierna suelta a mi lado.
Así que me pongo de pie, me pongo una bermuda de Pablo que me queda demasiado grande pero, cumple su función, para después salir de la habitación y dirigirme al techo. Al famoso jardín que mi abuelo le hizo a mi abuela como regalo de amor.
Las noche en la ciudad de México está más viva que nunca. Desde donde estoy, puedo escuchar la música viva que se toca en algún punto cercano. Las estrellas brillan, como es costumbre en las noches de primavera, y a lo lejos la luna alumbra todo el cielo, haciendo que las farolas de la calle sean opacas ante su claridad.
Yo me siento en una de las tantas sillas tipo “Acapulco”, que hay en el techo, y tomo el anillo que me dio Antonio. Le de nuevo la frase grabada y el sentimiento de nostalgia me invade. ¿Cómo es que un amor tan bonito terminó de esta forma?
⏤Me ilusionaste, ¿sabes? ⏤ hablo para mi misma⏤¿Cómo es que un hombre puede hacer tantas promesas y después irse sin cumplir nada? Dijiste que me querías, que no podrías vivir sin mí y, ahora, ¿esto?
⏤¿Lila? ⏤ Escucho la voz de mi hermana.
Alegra se acerca con cuidado hacia donde estoy, y jala otra de las sillas Acapulco, para sentarse a mi lado. No me dice nada más, solo ve hacia el cielo y juega con su cabello rizado, pasándolo entre sus dedos.
⏤Traté de ser como tú, ¿sabes? ⏤ Comienzo yo la conversación⏤. Quería que esto fuese solo una noche más de diversión, tener algo con él y luego irme a mi casa, como solías hacerlo tú. Sin embargo, no pude. Debí, olvidarme de él ese día, ignorarlo cuando lo volví a ver. Debí contártelo para que me aconsejaras. Debí hacer tantas cosas.
⏤Basta, Lils ⏤ contesta mi hermana ⏤. Que yo me siento muy culpable por no haber estado contigo. Por haberte robado la historia de amor que te pertenecía a ti ⏤ confiesa.
⏤¿Cómo me va a pertenecer algo que no es mío? ⏤ pregunto.
Alegra, junta más su silla a la mía y me toma de la mano.⏤ Lila, quizás te sorprenda lo que voy a decir, pero no debes culparte. No puedes responsabilizarte por haber amado con tanta intensidad. El amor, desafortunadamente, es así. A veces no es correspondido como esperamos, otras veces supera todas nuestras expectativas. En ocasiones nos hace sentir únicos, pero de repente nos damos cuenta de que no significamos nada. Sé que no soy la persona más adecuada para dar consejos sobre el amor, Lila. Pero, si algo he aprendido de mi relación con Karl, es que el amor tiene diferentes comienzos y finales, pero sobre todo, tiene sus propias pautas, donde las historias y los destinos encuentran su lugar. Te pido que no veas esto como un final, sino como una pausa. Tal vez tu destino y tu historia se estén reconfigurando en este momento.
Sonrío levemente⏤¡Guau!, el amor de Karl te ha hecho bien ⏤ expreso.
Mi hermana acaricia mi rostro y veo como las lágrimas brotan y caen por sus mejillas⏤. Me siento culpable por no haber estado contigo y concentrarme solo en mi historia de amor. Siempre hemos estado juntas, desde pequeñas. Te salvaba de todo tipo de situaciones y pude haberte salvado de esta.
⏤ Tal vez, no tenías que hacerlo, porque este era mi momento de aprender y lo hice. No te sientas culpable por buscar tu felicidad, todos al final lo hacemos, ¿qué no?
⏤ Entonces, no te quedes aquí. Regresa a Madrid, continúa tu sueño, retoma tu vida.⏤ Me ruega⏤ . No quiero cumplir mi sueño si tú no cumples el tuyo también. Somos las gemelas que lo hacen todo juntas, ¿recuerdas? Hemos vivido en Nueva York, soñado juntas, hecho travesuras juntas. No quiero pensar que esto lo tengamos que hacer separadas.
⏤¡Ay Ale! ⏤ expreso, para abrazarla con fuerza⏤ . Tal vez esto si lo tenemos que hacer separadas pero, eso no significa que nos separaremos. Tengo que hacer esto sola, sanar sola, retomar mi camino sola pero…
⏤ … no en soledad ⏤ agrega. Amo esa frase de mi padre, me hace sentir esperanza.
⏤Bueno, si te quedas aquí, tendré pretexto para traer a Karl. Tengo tantas cosas que contarte de él, de su familia pero, creo que no es el momento.
⏤Verás que mañana lo será ⏤ le contesto.
Así, Alegra se recarga sobre mi hombro y ambas nos quedamos viendo hacia el cielo. Solíamos hacer eso cuando éramos pequeñas y nos quedábamos dormidas en el balcón de la casa de nuestros abuelos; arrulladas por las olas del mar.
⏤ Lils, ¿has pensado en llamarle?, ¿pedirle alguna explicación? ⏤ murmura.
Suspiro. En este momento tengo tanta rabia y tristeza que no deseo nada que tenga que ver con él. Sin embargo, sé que en algún punto querré respuestas y no sé si tenga el valor de ir a buscarlas o me quedaré con las dudas.
⏤No lo sé. Hoy solo deseo dormir. Mañana podré responder esa pregunta. Tal vez el destino me dé la respuesta.
⏤ Tal vez ⏤ Escucho su voz, ya adormilada.
Yo me recargo sobre el respaldo de la silla y me acomodo para tratar de dormir. La noche de hoy está fresca pero amortigua en calor que hace dentro del piso. En este instante, yo soy la luna y él, en Madrid, es el sol. Uno que me dio directamente a los ojos y me cegó, sin que yo pudiese ver más allá de sus rayos.
⏤ Yo te quería ⏤ murmuro, cuando mi hermana está ya dormida ⏤ , ¿por qué me rompiste el corazón? ⏤ Y sin más, me suelto a llorar en silencio, hasta quedarme dormida.
***
La decisión estaba tomada; me quedaría en este colorido piso para intentar recomponer mi corazón y encontrar mi nuevo camino. Antonio ya había tomado sus decisiones y elegido su destino, y no podía hacer más al respecto. Con el tiempo, me di cuenta de que había tomado la decisión correcta al no regresar a su lado.
Días después, me enteré del poder de los Karagiannis, cuando mis redes sociales se llenaron de mensajes negativos aborreciendo mis diseños y quitándome mis diseños. No lo podía creer, mi marca se encontraba en ruinas antes incluso de despegar, y comprendí que tenía que empezar de nuevo en esa área también.
Sin embargo, lo que más me dolió no fue eso, sino que ahora las noticias se encargaron de restregarme en el rostro la boda de Antonio. Antes, nadie sabía de él, ni como encontrarlo y ahora, salía en todas partes.
Vi su foto mientras yacía envuelta en las suaves sábanas de algodón. Allí estaba él, de pie, junto a una mujer de cabello negro y largo, con una sonrisa radiante en su rostro. Se habían casado recientemente, y esa imagen me causó un dolor profundo. Sin embargo, lo que más me hirió fue ver el vestido que, yo misma, había diseñado y cosido a mano luciendo en la esposa de Antonio; la misma mujer que me había arrebatado el amor de mi vida. Había hecho el vestido, que iniciaba su historia de amor.
Dejé el móvil al lado, y me solté a llorar… hoy comenzaba mi pausa para que mi historia y mi destino, se acomodaran.