El trato con Karl quedó simple, sexo, era todo lo que sucedería entre los dos y ya no había marcha atrás. El trato era oral, pero se cumpliría y antes de que el tema pasara me aseguré que entendiera las condiciones que le había puesto; me sorprende, pero de verdad lo comprendió. Aun así, antes de que él se desocupara de una larga llamada que hizo completamente en inglés, yo me encargué de llenar los huecos para que nada se escapara, por lo que, al terminar, había más condiciones.
⏤Y se pueden besos, pero solo cuando estemos solos, ¿alguna pregunta?⏤ le digo, mientras vamos en el auto directo a mi casa.
⏤Son más condiciones que cuando adquieres una tarjeta de crédito⏤ me comenta, y yo sonrío.
⏤Yo no necesito tarjetas de crédito⏤ respondo coqueta, mientras me acomodo el vestido de lentejuelas que se encuentra completamente limpio.
⏤Primero, qué presumida y segundo… dices que yo soy el aburrido y ahora tú eres la aburrida⏤ me dice, y yo de inmediato lo veo sorprendida.
⏤¿Qué?
⏤Quieres puro sexo, ser libre pero… nada de espontaneidad. Ahora hay más condiciones que nada y eso lo hará aburrido⏤ me comenta, y sonríe coqueto.
Me quedo en silencio, ¿a caso le está dando vuelta a esto?, pienso, mientras él voltea a ver el tráfico.
⏤Eres ingobernable pero… ¿tú me quieres gobernar?⏤ me pregunta.
⏤¿Qué condiciones quieres quitar entonces? ⏤ le pregunto, y él sonríe.
⏤Las últimas 24 que pusiste, las de la mañana estaban bien. Aunque, lo de los besos suena divertido, pero yo soy más un tipo de hombre que los roba… ¿puedes cambiarlo a eso?, ¿dejar robarte besos? ⏤ insiste.
⏤¿Qué tan seguido?
⏤Un beso robado no tiene condición, solo se roba y ya… ¿los quieres o no?⏤ me pregunta, y ahora soy yo la que sonríe.
⏤Bien… dejemos esa condición⏤ accedo y no tengo ni idea del porqué lo hago pero al parecer su instancia puede conmigo.
⏤Gracias… ya se le quitó lo aburrido a todo⏤ me dice seguro, para después dar vuelta en la cuadra y estacionarse a tres casa de la mía.
Karl apaga el auto y luego me voltea a ver.⏤¿Qué pasa?⏤ pregunto.
⏤Siempre dices que no quieres que te vean conmigo, así que… puedes bajarte y caminar.
⏤¡Ah vale!⏤ contesto, y busco mi bolsa para bajarme de inmediato, sin embargo, no la encuentro.⏤ Creo que olvidé mi bolsa en tu casa⏤ le digo, y él levanta la ceja y me sonríe coqueto.⏤¿Qué hiciste con la bolsa? ⏤ inquiero.
Karl voltea hacia atrás y veo que la puso en el asiento de atrás del auto. La veo, luego a él y como si ambos entendiéramos el mensaje sonrío.
⏤¿Es en serio? ⏤ le pregunto, y él, sin decir nada, abre la puerta del auto, se baja y después entra a la parte de atrás y se sienta.
⏤¿Quieres tu bolso o no?⏤ me pregunta.
Sin pensarlo dos veces, me salto los asientos y me voy a la apretada parte de atrás y me siento sobre sus piernas quedando pegada a su cuerpo. Karl acomoda sus manos sobre mis muslos y me empuja más y así quedamos increíblemente cerca.
⏤No seas cobarde, Alegra… si vamos a hacer esto hagámoslo divertido… o ¿qué?, nunca has hecho algo así⏤ me murmura, mientras sus manos suben por mis glúteos y comienzan a acariciarlos de una manera que comienza a excitarme.
⏤¿Cómo haces eso?⏤ le pregunto, mientras mis labios comienza a besar los suyos.
⏤¿Hacer qué?⏤ pregunta, mientras siento la dureza de su intimidad.
⏤Eso, con las manos… en realidad se siente fantástico⏤ confieso, sintiendo unas ganas terribles de que esto suba de nivel.
⏤Tengo mis trucos… hablar de cosas intimas no es parte de tus 101 estatutos y reglas⏤ responde, mientras mis manos comienzan a desabrochar su camisa y acaricio su pecho.
Karl y yo seguimos besándonos, lo hacemos con prisa, deseo y excitación. Me siento tan caliente que, junto el calor del auto siento que voy a explotar por completo.
⏤¿Quieres que me lo quite?⏤ le pregunto, mientras mis manos bajan al fondo de mi vestido para levantarlo.
Él no me responde, solo sigue besándome, acariciando mi cuerpo por debajo del vestido y, cuando pongo mis manos sobre su intimidad, él se ríe.
⏤Parece que estás decidida, cariño, pero ahora no tengo protección⏤ me murmura.
Estiro las manos hacia mi bolsa y saco un preservativo que abro con los dientes en frente de él⏤ mujer prevenida vale por mucho… cuerpo caliente, mente fría⏤ repito las palabras que alguna vez me dijo mi padre.
Karl se desabrocha el pantalón y yo tomo su intimidad con mis manos para acariciarla un momento. Él cierra los ojos, lo disfruta, y solo ver su rostro se me hace extremadamente excitante. Con maestría, pongo el preservativo y siento como sus dedos hacen a un lado mi pantaleta para después entrar en él.
⏤¡Dios!⏤ expreso.
⏤No metas a Dios en esto⏤ me comenta, para luego comenzar a besarnos y yo moverme sobre él de una manera que nos encanta a los dos.
El calor dentro del auto es infernal, al grado de que los vidrios comienzan a empañarse pero, no nos importa. Ambos estamos en “esto” que hemos hecho y lo único que queremos es disfrutar. Los labios de Karl viajan por mi cuello, a mis pechos, mientras los míos no dejan de gemir como si no tuviese miedo de que los vecinos me escucharan. No sé si es la adrenalina de saber que en cualquier momento alguien nos podrá descubrir o tenerlo dominado a mi placer debajo de mis piernas pero, esto es excitante, algo que no pensé que experimentaría este día y mucho menos con él.
Sigo moviéndome, cada vez más rápido hasta que ambos terminamos con un gemido que juro se escuchó hasta mi casa, así que lo callo pegando mis labios a los suyos y dándole un beso que de pronto, se convierte a uno más apasionado, tocando nuestras lenguas mientras tratamos de calmar nuestra respiración.
Nos separamos, veo a Karl completamente sudado igual que yo y con una sonrisa me dice⏤¿ves?, ¿cómo lo espontáneo puede ser divertido?
Yo me muerdo los labios⏤¿en qué otros lugares lo puedes hacer?
Karl encoge los hombros⏤ llévame al lugar, y verás donde más puedo…⏤ me responde, para luego darme un beso sobre los labios y sonreírme⏤ me gusta “esto”⏤ me asegura para después subir el tirante de mi vestido y cubrir mis pechos.⏤ Espero no pase tanto tiempo antes de nuestro próximo encuentro, Alegra Canarias⏤ me dice, y yo no hago más que sonreír.
Alegra se enredo ella solita.